Introducción
Las imágenes en un portal web son más importantes de lo que en principio puede parecer. Es un reto, para los diseñadores y programadores de páginas web, crear unas imágenes lo más eficientes posibles (mínima capacidad con el máximo tamaño) manteniendo, a su vez, un diseño atractivo y la máxima calidad.
Hace años las imágenes (archivos gráficos) eran algo que se tenía muy en cuenta ya que, en un entorno en el que abundaba el módem y las redes lentas, que las imágenes de una web fueran ligeras y estudiadas era un práctica muy necesaria para fidelizar las visitas a una web y para que ésta tuviera éxito.
Más tarde con la implantación masiva del ADSL, las redes lentas desaparecieron y con ellas fueron cayendo en desuso las buenas costumbres del uso de las imágenes.
En la actualidad
Hoy en día, no parece importante que las fotografías e imágenes en general sean de tamaño grande, pero esta afirmación está muy lejos de la realidad. El peso excesivo de varias imágenes provoca que una web no sea rápida. Generalmente con las líneas de alta velocidad tan asequibles no parece importante para los usuarios que visitan una web, pero Google, entre otros, a través de sus robots también la visitan y éstos sí que lo tienen en cuenta. Y no sólo Google tiene en cuenta cuánto tarda una web en ser servida, si no directorios importantes, análisis de webs como Woorank, rankings como Alexa u otros buscadores también pueden penalizar un poco la posición en los buscadores por esta causa.
Buenas prácticas con imágenes
Para aquellas personas que afrontan el reto de crear su propia página web y para todos nuestros clientes (sobre todo aquellos que poseen una tienda online), deben tener en cuenta para sus webs (o fotografías de su tienda online) los siguientes consejos:
Consejo 1: Una imagen debe tener unas dimensiones lo más reducidas posibles sin deformarla y sin que ésta pierda calidad de visión al ojo humano.
Consejo 2: Una imagen debe estar en formato JPEG (.JPG) en líneas generales. Si además la imagen tiene transparencias, ésta debe ser PNG (.PNG). Y si la imagen tiene transparencia o pocos colores, o creamos una imagen de baja calidad con una pequeña animación, la imagen debe ser en formato GIF (.GIF).
Consejo 3: El tamaño de una imagen no debe pasar en casi ningún caso de los 100 KB, siendo lo adecuado y óptimo no pasar de unos 20 KB para JPEG, y 35 KB para animaciones en GIF.
Consejo 4: Para el uso de imágenes que no sobrepasen de 256 colores, debe usarse GIF.
Consejo 5: Si es necesario presentar una imagen de alta calidad es muy importante avisar de ello, o poner una miniatura de la misma. Esto es frecuente en galerías de fotografías de algunas webs.
Consejo 6: Las imágenes SIEMPRE deben estar acompañadas de un texto que las describa, no sólo en el nombre del archivo si no también en el parámetro ALT de las mismas. Ello supone una ventaja para personas con capacidades reducidas (visión, audición, parálisis, etc.) y es una buena medida para los buscadores. Además supone el primer paso para obtener certificados de calidad para los websites.
Consejo 7: Evitar imágenes innecesarias u obsoletas.
Consejo 8: Uso del lenguaje .css para el diseño de las páginas web y las imágenes que lo componen.
Consejo 9: El uso de un buen programa para minimizar el tamaño de las imágenes es imprescindible. Recomendamos The Gimp (versión Windows o versión Linux).
Todos estos consejos aumentarán la rapidez con la que el servidor trabaja, disminuyendo el tiempo de respuesta en las solicitudes de sus visitas y no penalizando en Google.
Por supuesto, en Net&Software esta práctica es la habitual para la creación de páginas web.
